Investigación sobre la terapia magnética: para la recuperación de un accidente cerebrovascular
- Magnetoterapia en la rehabilitación de pacientes con isquemia cerebral
- Reorganización cortical inducida por tratamiento después de un accidente cerebrovascular en humanos
- Recuperación motora de la mano tras un accidente cerebrovascular: rendimiento pronóstico de la estimulación magnética transcraneal temprana
- Protección contra la isquemia cerebral focal tras la exposición a un campo electromagnético pulsado
Magnetoterapia en la rehabilitación de pacientes con isquemia cerebral.
Provotorov VM, Putilina MV.
Basándose en los resultados del examen clínico y el tratamiento de 420 pacientes con secuelas de un trastorno circulatorio agudo, los autores proponen un enfoque con base patogénica para la corrección de los fenómenos residuales tras un ictus. El método propuesto incluye tres ciclos de electromagnetoterapia de impulsos, combinados con quimioterapia estándar o masaje y ejercicio terapéutico.
Vopr Kurortol Fizioter Lech Fiz Kult. 2001 marzo-abril;(2):23-6.
Reorganización cortical inducida por tratamiento después de un accidente cerebrovascular en humanos.
Liepert J, Bauder H, Wolfgang HR, Miltner WH, Taub E, Weiller C.
Departamento de Neurología, Universidad Friedrich-Schiller de Jena, Alemania. liepert@neuro.uni-jena.de
ANTECEDENTES Y OBJETIVO: La reorganización cortical inducida por lesiones es un fenómeno ampliamente reconocido. En cambio, existe poca información sobre los cambios plásticos inducidos por tratamientos en el cerebro humano. El objetivo del presente estudio fue evaluar la reorganización en la corteza motora de pacientes con ictus inducida mediante un tratamiento de rehabilitación eficaz.
MÉTODOS: Utilizamos estimulación magnética transcraneal focal para mapear el área de salida motora cortical de un músculo de la mano en ambos lados en 13 pacientes con accidente cerebrovascular en la etapa crónica de su enfermedad antes y después de un período de 12 días de terapia de movimiento inducido por restricción.
RESULTADOS: Antes del tratamiento, el área de representación cortical del músculo de la mano afectado era significativamente menor que la del lado contralateral. Tras el tratamiento, el tamaño del área de salida muscular en el hemisferio afectado aumentó significativamente, lo que corresponde a una mejora significativa en el rendimiento motor de la extremidad parética. Los desplazamientos del centro del mapa de salida en el hemisferio afectado sugirieron el reclutamiento de áreas cerebrales adyacentes. En exámenes de seguimiento realizados hasta 6 meses después del tratamiento, el rendimiento motor se mantuvo en un nivel alto, mientras que el tamaño del área cortical en ambos hemisferios se volvió casi idéntico, lo que representa un retorno del equilibrio de excitabilidad entre ambos hemisferios hacia una condición normal.
CONCLUSIONES: Esta es la primera demostración en humanos de una alteración a largo plazo en la función cerebral asociada con una mejora inducida por la terapia en la rehabilitación del movimiento después de una lesión neurológica.
Accidente cerebrovascular. Junio 2000;31(6):1210-6.
Recuperación motora de la mano tras un ictus. Rendimiento pronóstico de la estimulación magnética transcraneal temprana.
Cruz Martínez A, Tejada J, Diez Tejedor E.
Unidad de Electromiografía, Hospital La Luz, Madrid, España.
Se realizó estimulación magnética transcraneal (EMT) a 20 pacientes en los primeros días tras el ictus. Se registraron bilateralmente los potenciales evocados motores (PEM) en los músculos de la eminencia tenar, y se compararon el tiempo de conducción motora central (TCMC), la amplitud de los PEM (A%M) y la intensidad umbral entre ambos lados. Seis meses después, los pacientes fueron reexaminados. En los primeros días tras el ictus, la obtención de PEM en reposo o durante la activación muscular voluntaria tiene un valor pronóstico favorable. Todos los pacientes con respuesta temprana a la EMT alcanzaron una buena función motora en los meses siguientes. El seguimiento mostró que la mejoría electrofisiológica estaba estrechamente relacionada con la recuperación clínica de la función de la mano. Sin embargo, incluso en casos con una buena recuperación, el TMC y, principalmente, el A%M, pueden ser significativamente diferentes de los de una mano normal. La EMT puede ser un indicador pronóstico temprano y valioso de la recuperación de la función de la mano tras el ictus, y su rendimiento pronóstico es superior al de la evaluación clínica y la TC. La TMS es un método cuantificable de discapacidad motora y puede tener aplicación práctica en el tratamiento y la terapia de rehabilitación en pacientes con accidente cerebrovascular.
Electromyogr Clin Neurophysiol. 1999 Oct-Dic;39(7):405-10.
Protección contra la isquemia cerebral focal tras la exposición a un campo electromagnético pulsado.
Grant G, Cadossi R, Steinberg G.
Departamento de Neurocirugía, Universidad de Stanford, California 94305.
Existe evidencia de que la estimulación electromagnética puede acelerar la curación del daño tisular después de la isquemia. Realizamos este estudio para investigar los efectos de la exposición a campos electromagnéticos pulsados (PEMF) de baja frecuencia sobre la lesión cerebral en un modelo de conejo de isquemia focal transitoria (oclusión de 2 h seguida de 4 h de reperfusión). La exposición a PEMF (280 V, 75 Hz, estimulador IGEA) se inició 10 min después del inicio de la isquemia y continuó durante la reperfusión (seis expuestos, seis controles). Se utilizaron imágenes por resonancia magnética (IRM) e histología para medir el grado de lesión isquémica. La exposición a campos electromagnéticos pulsados atenuó el edema de isquemia cortical en la IRM en el nivel coronal más anterior en un 65% (P < 0,001). En el examen histológico, la exposición a PEMF redujo el daño neuronal isquémico en esta misma área cortical en un 69% (P < 0,01) y en un 43% (P < 0,05) en el cuerpo estriado. Los datos preliminares sugieren que la exposición a un PEMF de corta duración puede tener implicaciones para el tratamiento del accidente cerebrovascular agudo.
Bioelectromagnetismo. 1994;15(3):205-16.
Efecto del campo electromagnético pulsado (PEMF) sobre el tamaño del infarto y la inflamación después de la isquemia cerebral en ratones.
Peña-Philippides JC1, Yang Y, Bragina O, Hagberg S, Nemoto E, Roitbak T.
Res. de accidente cerebrovascular transl. Agosto de 2014;5(4):491-500.
Se ha demostrado que los campos electromagnéticos pulsados (PEMF) tienen efectos antiinflamatorios y prorregenerativos en animales y humanos. Utilizamos Sofpulse (Ivivi Health Sciences, LLC), aprobado por la FDA, para estudiar el efecto de los PEMF en el tamaño del infarto y la inflamación posterior a un accidente cerebrovascular tras una oclusión distal de la arteria cerebral media (dMCAO) en ratones. El campo electromagnético se aplicó entre 30 y 45 minutos después del daño cerebral isquémico y se utilizó dos veces al día durante 21 días consecutivos. El tamaño del infarto isquémico se evaluó mediante resonancia magnética y análisis histológico. A los 21 días después de la dMCAO, el tamaño del infarto fue significativamente menor (en un 26 %) en los animales tratados con PEMF en comparación con los controles. La neuroinflamación en estos animales se evaluó utilizando una matriz de PCR especializada de citocinas/quimiocinas. Demostramos que los PEMF influyeron significativamente en el perfil de expresión de factores proinflamatorios y antiinflamatorios en el hemisferio ipsilateral al daño isquémico. Cabe destacar que la expresión del gen que codifica la principal citocina proinflamatoria IL-1α se redujo significativamente, mientras que la expresión de la principal antinflamatoria IL-10 aumentó significativamente. La aplicación de PEMF disminuyó significativamente la expresión de genes que codifican miembros de la superfamilia del factor de necrosis tumoral (TNF), un factor proapoptótico importante, lo que indica que el tratamiento podría tener efectos tanto antiinflamatorios como antiapoptóticos. Tanto la reducción del tamaño del infarto como la influencia en la neuroinflamación podrían tener un impacto positivo potencialmente importante en el proceso de recuperación tras un ictus, lo que implica que el PEMF podría ser una posible terapia complementaria para pacientes con ictus.
